La distinción, la sofisticación y el buen gusto a pie de playa tienen nombre propio: Cappuccino.
Desde su espectacular terraza, a cuya altura está la educación y preparación de los empleados, las vistas del Mediterráneo son realmente impresionantes. El ambiente tranquilo y luminoso es perfecto para desconectar del estrés de la vida diaria y olvidarse del mundo mientras te atienden a cuerpo de rey.
Los atardeceres son algo digno de compartir en este café restaurante de cinco estrellas. Un gin tonic, uno de sus estupendos cócteles o un zumo natural pueden ser el acompañamiento perfecto para evadirte de todo y conectarte con el mágico embrujo del mar.
Cobijados por las sombras de pinos y palmeras podemos disfrutar de uno de sus platos ligeros, sabrosos y sencillos: una ensalada, un sandwhich sano y delicioso, una hamburguesa de primera calidad, una refrescante ensalada, etc.
Mirar a la gente pasar es un placer destinado a aquellos que tienen un momento de calma y paz… ese momento es mejor vivirlo en Cappuccino.
En el aire flota un ambiente de perfecta armonía, cristalina luminosidad y sonrisas sinceras que hacen del lugar un lugar ideal para ir con los amigos o con alguien especial y pasar un rato inolvidable. La música chillout de fondo incrementa esta sensación de habernos colado en un oasis de sosegada alegría, de elegancia y saber hacer.
Desde los desayunos, acompañados por distintas variedades de panes ecológicos, bollería de primera calidad, raciones de jamón, salmón… frutas y cereales, zumos naturales recién hechos, huevos ecológicos, etc...
... Hasta sus sabrosas comidas y cenas en las que podrás encontrar un menú que mezcla las raíces mediterráneas con toques internacionales de gastronomías orientales, europeas y latinoamericanas, Cappuccino es una opción siempre inmejorable.
Sushi, hummus, sopas naturales, deliciosas ensaladas hechas con los ingredientes más frescos. Fish and chips, albóndigas suecas, curry rojo de langostinos y pollo, pollo tikka massala, pizzas tradicionales… cualquiera de estos platos puede ser una gran opción.
De postre tendrás varias posibilidades: fresas con nata, pastel de queso con frutas del bosque, gató mallorquín con helado de almendras, helado artesano de vainilla, pastel de zanahoria y nueces, pastel de chocolate, tarta de manzana, ensalada de fruta fresca con yogurt griego, banoffee…